Comida a Domicilio

¿Verdad que no hay tiempo?

La tecnología nos salvó de hacer tareas tediosas y nos brindó la posibilidad de que alguien más las haga por nosotros, además de que a veces carecemos del tiempo necesario para realizarlas hay ocasiones en las que necesitamos un break en la cocina y podemos dejarla de lado por un momento.

La tecnología nos salvó de hacer tareas tediosas y nos brindó la posibilidad de que alguien más las haga por nosotros, además de que a veces carecemos del tiempo necesario para realizarlas hay ocasiones en las que necesitamos un break en la cocina y podemos dejarla de lado por un momento.

  1. El auge de la comida a domicilio
  2. La gente vive sin tiempo
  3. Un socio tecnológico ahorrador de tiempo “Smartphone”
  4. Hace algunos años pedir comida mediante una aplicación era imposible
  5. La carta está en línea

El auge de la comida a domicilio

Las plataformas y webs que operan en el sector de la restauración generan un negocio de más de 60.000 millones de dólares en EEUU, Europa y Asia

El activo más importante de nuestra vida es el tiempo y no podemos darnos el lujo de dilapidar nuestras horas libres si no es completamente necesario, es por esto que vender tiempo (más que vender comida) es el negocio de los servicios de comida a domicilio.

El tráfico en la ciudad sumado a la fila de espera en un restaurant (o en los tacos) hace que la comida a domicilio  sea una forma de ganar tiempo en algunas de las tareas que tenemos pendientes, puesto que no existen personas que no sean multitareas ya en esta era, preparar el desayuno en las mañanas, llevar a los niños al colegio, dirigirnos al trabajo mientras programamos las salidas del fin de semana, todo esto y un sinfín de factores hace que miles de personas opten por la comida a domicilio antes de preparárselas ellas mismas o salir a buscarlas.

Pedir comida a nuestro hogar es una satisfacción y un breve consentimiento que sabemos que nos merecemos por tener un día de campeonato.

La gente vive sin tiempo

Prisas por las mañanas, tráfico al mediodía y por las tardes, falta de energía por el rudo horario laboral, en fin mucho de esto hace que la gente no tenga ánimos para cocinar y claro ¿quién no quiere que lo consientan de vez en cuando? O bien “todos merecemos ser consentidos por nuestro infatigable espíritu de luchador” la comida a domicilio no es un pecado y si bien nos da la oportunidad de ahorrarnos un poco de nuestro valiosísimo tiempo ¿Por qué no tomar esa opción?

Un socio tecnológico ahorrador de tiempo “Smartphone”

Lo usamos para todo, admítelo. Desde entretenernos en redes sociales hasta monitorear muestra salud, no por nada se les llama teléfonos inteligentes, ahora con el acceso a internet tenemos la posibilidad de acceder a una mayor cantidad de información (bye sección amarilla) y por lo tanto podemos ver las opciones y los servicios que más nos convengan desde nuestro pequeño portal móvil, fácil ¿verdad? Como lo puedes notar más que un artefacto tecnológico es tu socio de tiempo completo.

Pedir comida a domicilio mediante una aplicación antes no era posible (sí millenial como lo leíste)

Avanzamos a pasos agigantados en esto de la tecnología, cada vez los productos están más cerca de nosotros y los podemos encontrar a un solo clic desde nuestra casa, la comida a domicilio no es nueva en este ámbito puesto que su recorrido empezó desde antes de la llegada de los teléfonos inteligentes así que como veterana ya tiene ganado su lugar en la era de los Smartphones.

Entregas más eficientes, comida caliente, productos como si fueran servidos directamente desde el restaurante, en fin parece que la comida a domicilio creció y sigue creciendo con la misma rapidez que la tecnología, es por eso que grandes compañías brindan servicios de entregas a domicilio sin ser ellos quienes directamente elaboren la comida.

Las aplicaciones nos facilitan el acceso a estos servicios y a muchos otros, fáciles de instalar y de uso sencillo, esto hace que nuestra manera de ordenar sea rápida, desde el hogar o el trabajo y sin contratiempos como el tráfico o el poco espacio del que disponemos para comer.

La carta está en línea

De la manera tradicional o adaptada a la tecnología, la carta se puede leer de las dos maneras sin restar el valor que tiene, pero hay que admitirlo nos parce más práctico ver muchas cartas en poco tiempo sin tener que movernos de restaurante en restaurante, podemos ver nuestra serie favorita mientras llega la orden o dedicar  nuestro tiempo a alguna actividad pendiente.

Así que más que vender comida a domicilio el servicio es por tu tiempo ahorrado y bien utilizado.

Compartir en:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *